Las cartas que nunca escribí
Me dise el regalo de la eternidad buscando la continuidad de la vida, una vida eterna que no existe solo existe la vida misma, pero un trozo de ti esta en mi, lo mas importante es, que la herencia de la sangre continua y yo sigo aquí.
La niñez fue esa parte de las experiencias, mas importante de lo que soy, fue feliz, triste y a la vez divertida la base de lo que soy actualmente, me llevaste en tu vientre, en tu regazo, me llevaste de la mano a todos esos sitios que me enseñaron el mundo, pero no respondiste a mis preguntas por que nunca me lo preguntaste......... y ahora me pregunto a mi mismo por que?.......
Por que tu?... tan inteligente tan llena de vida, tan llena de experiencias, tan sabia, no me miras tal y como soy, solo vez lo que quieres ver. No sigas mirandome así......
- Soy el mas pudoroso que pueda existir sobre el suelo que piso, pero me gusta la desnudez del alma, sucia desgarrada, maltratada, mal herida, perdida pero desnuda.
Y aquí estoy quitando los trozos de la vida de otro para encontrar la mía, ahora después de mil años de existencia me las quito por que no puedo pedir mas tiempo al tiempo que me quita la vida.
Me quito los zapatos que me han acompañado todo este tiempo, los que me ayudaron a pisar con cuidado aquellas espinas que tenia tantas ganas de pisar y ahora descalzo me duele mas que una sola palabra de engaño, tengo mil años de existencia, hasta hoy te digo que soy de verdad y que las huellas que encuentras en casa llenas de sangre son las mías, que te dicen que el amor esta en todos sitios y que es real.
Me quito la camiseta sudada y llena de perfume, la dejo tirada en el suelo y deja el olor de un mundo enorme que ha recorrido y dice que sigue siendo tan pequeño como un grano de arena, dice también que hay agua salada que te libera y que allí empezó el principio de los principios del mundo que nunca conoció nadie. Desde entonces se que existe la vida que hoy conozco, pero antes de mi la vivieron muchos como yo.
Me quito el gorro que no me deja recibir el calor del sol, me lo quito cansado de estar bajo la sombra que no da color y como un daltónico me ha tocado adivinar cual es cual, pero es casi el mismo que todos pueden llegar a distinguir, por que se que la esperanza es verde y que mi vida es azul como un día lo fue mi casa, ahora puedo ver que es así y que tenia razón, por que por muy blanco que pueda estar el suelo veo tantos colores como mil estrellas en cielo y si esa variedad existe también tengo un hueco en ese pequeño y gran circulo llamado mundo.
Antes de quitarme los pantalones vacío mis bolsillos para demostrarte que no me queda nada y que solo tu eres lo que importa, de mi bolsillo izquierdo saco mi teléfono donde tengo una agenda llena de amigos que siempre están conmigo lejos o cerca pero a mi lado, muchos de ellos me enseñaron que el mundo me pertenece, me enseñaron a dar aquello de lo que fui privado desde un entorno egoísta y les di mi verdad, ellos me dieron la suya y por eso hacen parte de ese otro mundo paralelo que construimos juntos. De mi bolsillo derecho saco una monedas de no se que país y unos billetes mojados que por mucho valor que tengan nunca podré comprar tu corazón.
Ahora esta lloviendo y estoy frente a un acantilado viendo la inmensidad del mar, me quito los pantalones y estoy listo para marcharme, me digo adiós y con esto tu también le dirás adiós a aquello que creías, me lanzo al vacío solo me quedan segundos para tocar el agua y mientras caigo desaparece mi sombra, ahora solo soy yo por un rato mientras me das la mano para estas siempre contigo acompañados de la verdad.